Bit a bit

Empecé borrando emails y otras pavadas,
punto docs y jpegs, besos zipeados.
Un rotundo shift delete, sin reciclado,
luego format y fdisk, siete pasadas.

Al exilio digital vas condenada.
Hoy reimprimo cada foto en las repisas
retocando y destrozando tus sonrisas
hasta sólo yo quedar, besando nada.

Filtré tu IP en mi firewall, hackeé tu blog.
Son en vano estos mil clics y reseteadas.
No existe filtro ni plugin en Photoshop
para esfumar tu fantasma de mi almohada.

(Huevada inspirada por el fantástico tango Viejo Link, de Rubén Rubén, al que llegué a partir de este artículo en El Lomo)