Escándalo potencial

Nos cuentan por ahí que uno de nuestros informantes se habría enterado de un suculento rumor: se dice que uno, dos o más individuos (de género a confirmar, edad a definir y señas particulares a detallar) realizaron una serie de actividades de legalidad incierta en alguna ubicación emplazada en cierta ciudad que se encontraría localizada en un planeta que, según comentan, bien podría ser la Tierra.

Publicaremos más detalles de esta fascinante historia apenas nuestros abogados nos lo permitan.

La mona se viste de seda

Luego de un par de días de andamios, rodillos, rasqueteo y yesería, tenemos una flamante versión de Amor Entintado entre nosotros. No es que me haya cansado de la versión anterior ni mucho menos; de hecho, soy un gran aficionado a la simpleza y los weblogs de columna única me parecen extremadamente elegantes. Pero con tanto sitio paralelo que se me dio por armar en los últimos tiempos, tuve ganas de empezar a integrarlos de alguna manera más orgánica a Amor Entintado, que por su veteranía oficiará siempre como base central para todas esas sucursales.

La idea detrás de todo esto, entonces, fue la de refrescar un poco la fachada y a la vez mantener un poco el estilo "histórico" del sitio (si es que tal cosa existe). Y esto es lo que salió, me temo.

Para ser más específico, permítanme repasar algunos de los detalles novedosos de nuestra nueva encarnación:

Captura miniaturizada autocontenida de Amor Entintado

Captura miniaturizada autocontenida de Amor Entintado

  1. Primero y principal, mucho espacio en blanco. Entendemos perfectamente la necesidad de cualquier lector circunstancial de contar con algún lugar neutro al que se pueda desviar la vista luego de exponerla a los variados horrores que aquí suelen exhibirse.
  2. Renovada cabecera que sin embargo remite obviamente a las anteriores, completa con práctico menú de acceso a otros lugares accesibles mediante dicho menú de acceso.
  3. Estos prácticos firuletes marcan con claridad el final de un desvarío y el comienzo del anterior. Su nombre científico/caligráfico es "churunflo".
  4. La mayor novedad es la barra lateral, pletórica de contenido y conservadora en anchura.
  5. Esta bonita caja de búsqueda permite encontrar con asombrosa rapidez una andanada de artículos inútiles que, supuestamente, contendrán cualquier tipo de palabra, término o fonema que interese al visitante.
  6. Un vistazo en tiempo real a la fría oscuridad del alma de un seguro servidor, tomada de su página de Twitter sin ningún tipo de filtro o censura previa.
  7. La más reciente imagen publicada en Tintografías, nuestro humilde fotoblog, en un tamaño minúsculo capaz de causar miopía en menos de 30 días hábiles. Haciendo clic sobre la misma podrán visitar el sitio de marras y ver las cosas sin necesidad de lupa.
  8. Últimos enlaces recopilados en ese catálogo de cosas encontradas por ahí al que llamamos, en un arranque de gastronomía y criollismo, Puchero de tinta.
  9. Más de cinco años de historia concentrados en un compacto menú desplegable.
  10. Las categorías inentendibles en las que elegimos archivar nuestra obra inentendible. Nadie nos puede acusar de ser poco coherentes.
  11. El mejor servicio que podemos proveerles: una lista de sitios (weblogs, webcomics y otros) genuinamente buenos, como para que puedan recuperar la fe en la humanidad toda.
  12. Por último, lo más parecido a una frase de cabecera que tenemos.

Quedan todavía aristas que pulir y detalles que mejorar, pero la cosa en general está relativamente encaminada. La cruda verdad es que mis habilidades no dan para mucho más.

Agradezco anticipadamente todo tipo de críticas, sugerencias, insultos y amenazas de muerte a través de los comentarios. Porque, como decía alguien hace un par de décadas, sin ustedes allá nosotros acá para qué.

De todo, como en botica

Traemos en esta ocasión a sus pantallas y parlantes una nueva entrega del ya legendario Mezcladito Entintado, que hace honor a su nombre como nunca antes. Se trata de un puñado de canciones sin ningún tipo de hilo conductor o característica en común, más allá del gusto personal de quien firma estos párrafos. Eclecticismo sonoro para salpimentar este viernes soso, o algo así.

Hoy les ofrecemos, en ningún orden en especial (y, ciertamente, no en el orden en que aparecen en el Mezcladito):

  • Una canción nuevita que da ganas de ponerse a bailar hace 25 años.
  • Una de las canciones más alegremente pegadizas canciones de los últimos años, en un cover soul listo para una FM bien light.
  • Una canción mezcla de swing y zydeco con un bonito solo de algo que debería ser marimba.
  • Una gran canción, a cargo de un gordito de peluca (compositor original de la música) y un despeinado con mala dentadura.
  • Una canción que originalmente cuenta con una batería impresionante, pero en versión desenchufada y sin batería.
  • La primera canción en la que uno de mis grupos favoritos usó la trilladísima palabra "amor" en el título.
  • Una canción de un grupo que visitó estas tierras algunas semanas atrás, cuyo videoclip me gusta casi tanto como su melodía.
  • Una canción que fue hit hace relativamente poco, versionada de forma tal que parte de su gracia se pierde por un cambio de género.

Premio invaluable, invisible e inexistente para quien adivine cuál es cuál.

Que lo disfruten.

Once pasos

Hace sonar el silbato y sale disparado hacia un punto, en donde se para y señala con el brazo extendido. Luego camina lentamente hacia atrás, haciendo ademanes de que no hay nada para discutir, se planta unos metros más allá y espera para dar la orden. No importa que no haya jugadores, que no haya partido, que no esté en una cancha, que nadie haya inventado el juego del fútbol, que se encuentre en otro planeta, en otra época y en otro universo, que ni siquiera sea humano; el tipo sintió la urgencia de cobrar un penal y lo cobró.

¡Eh! ¡Réferi bombero!

Todo en orden

El semáforo pasó de amarillo a verde. El taxista puso primera y en apenas unos segundos llegaron a la puerta de la casona. Un cartel anunciaba en letras desvencijadas que se trataba del "Hogar Para la Tercera Edad «Mi Cuarto Azul»". El lúgubre silencio del lugar, rodeado de quintas abandonadas, se rompía ocasionalmente por el grito anacrónico de un diariero lejano anunciando la sexta edición.

El viejo sentado en el asiento trasero tragó saliva, intentado calmar esa sensación apretada en la garganta. La angustia de llegar a un lugar desconocido le recordó sus inicios en el Séptimo Regimiento de Granaderos, en los tiempos en que su voz era todavía una octava más aguda y en donde su misión principal consistió por varios meses en liderar al grupo en el rezo de la novena en la capilla. Suspiró para despejarse y salió con dificultad del auto, resignado a malgastar plácidamente esa décima parte de vida que quizás le quedaba.

Sin novedad en el frente

Los períodos de silencio relativamente prolongados aquí en Amor Entintado suelen balancearse con algo de acción en las otras sucursales de este enorme conglomerado multinacional. Para confirmar semejante afirmación, basten estos ejemplos:

  • El menjunje de cosas encontradas conocido como Puchero de Tinta cuenta ya con más de 27 páginas de pavadas electrónicas.
  • Hemos superado la barrera psicológica de las 100 imágenes en Tintografías, en parte gracias a una cantidad interminable de fotos tomadas en un reciente viaje relámpago a la Gran Manzana (lo cual justifica el hecho de que en el 98% de ellas aparezca al menos un taxi).
  • Por último, hace un par de días resucitamos nuestro Twitter, arrancándolo de las manos de aquel misterioso prisionero que lo usurpó en sus inicios y que ahora desapareció tan misteriosamente como había llegado (confesamos temer por su bienestar emocional y físico). Ahora les traemos a nuestros amigos twitterizados algo más despierto y dinámico, pero no se aflijan: sigue siendo algo tan indescifrablemente inútil como todos los otros productos de nuestra fábrica.

Además, prometemos que pronto estaremos actualizando las canciones de nuestro aletargado Mezcladito Entintado, que ya está juntando algo de moho en los rincones.

Y que sigan los éxitos.

Saint Baptiste Gold Label

El usuario de Saint Baptiste Gold Label es educado, cosmopolita y aficionado al arte y la gastronomía. Sabe exactamente lo que quiere y no duda en conseguirlo, pero jamás vulnera leyes u ofende a sus pares para lograr su objetivo; el usuario de Saint Baptiste Gold Label es determinado sin ser testarudo, caballeroso sin caer en la afectación, flexible sin llegar a contorsionista profesional. La probabilidad de que el nombre de un usuario de Saint Baptiste Gold Label comience con la letra G y simultáneamente viva en un tercer piso es prácticamente cero. Si dos usuarios de Saint Baptiste Gold Label juegan a la rayuela, invariablemente gana aquel cuyo nivel de glucosa en sangre sea menor. Al ser disuelto en una bañera de ácido, el cadáver de un usuario de Saint Baptiste Gold Label emite un siseo agradable y constante en su entonación, siempre en Si bemol.

Autorretrato I

Autorretrato I (2009)

Autorretrato I (2009)

Para un medio tan egocéntrico y ombliguista como un weblog personal (sobre todo el que aquí nos atañe), nada mejor que una bonita serie de autorretratos sin ningún tipo de mérito artístico.

En este primer ejemplar, todos quienes tengan el dudoso honor de conocerme estarán de acuerdo en que los ojos son lo único medianamente parecido a la realidad.

Perspectiva fresca

Una breve lista de potenciales novelas/películas/obras teatrales que se basan en historias existentes enfocadas desde un ángulo novedoso:

  • El Quijote, narrado desde el punto de vista de Dulcinea.
  • La final del Mundial '78, narrada desde el punto de vista de la pelota.
  • La caída del muro de Berlín, narrada desde el punto de vista de un pastor egipcio del siglo VII AC.
  • El Ulises de Joyce, narrado desde el punto de vista del papel en donde fue impreso.

Creo que tengo una mina de oro entre manos.

La arañita

A la izquierda, miles de soldados cartagineses celebrando el triunfo en la Batalla de Cannas, los ojos borrachos de odio y gloria, la sangre de los romanos todavía fresca en sus sandalias. A la derecha, una tostadora Electrolux modelo "Buon Giorno TS-300", todavía en garantía. Y justo en el centro, balanceándose suavemente con el viento y silbando una rumba, una arañita a la que le faltan apenas una docena de neuronas para darse cuenta de lo ridículo de toda la situación. Pobre arañita; qué suerte, la arañita.

Disímiles

Llueve como si las zapatillas del portero fueran medio número más chicas y por alguna razón eso causara la lluvia. Triste como perro con dos colas que no puede caer en la frase hecha. Fríos como los sueños del sesenta por ciento de los habitantes de Letonia, los cuales no parecen ser mala gente pero, la verdad, exageran un poco con eso de la gelidez onírica. Escribe como si la pobre página en blanco le hubiera escupido el plato de ravioles.

(Con las debidas disculpas a EAG)

Quinquenio

Hace exactamente cinco años, con una parrafada de dudosa factura que comenzaba a marcar la pauta indudable de lo que vendría después, este bonito weblog hacía su debut. Hoy, cuatrocientos posts y más de cinco mil comentarios más tarde, seguimos acá y todo indica que no nos vamos a ningún lado.

La vida de Amor Entintado coincide con algunos de los mejores años de la mía propia y se me hace imposible separarlas. Escribo esto, mal o bien, con el mismo entusiasmo que aquellas primeras pavadas. Lo disfruto muchísimo y, por lo tanto, lo hago un poco (bastante) para mí. Pero lo cierto es que, más allá de ese egoísmo, el paquete termina de cerrar cuando le llega a alguien de afuera, a otro que no soy yo.

Vaya entonces un gran abrazo, imaginario pero bien real, para todos los que malgastan un rato de sus vidas en este rincón.

Herencias

De su padre heredó los ojos castaños y el gusto por el jazz. De su madre heredó el paso cansino y la forma de estornudar. Del perro heredó la desconfianza y una leve tendencia a la socialdemocracia. De un campesino polaco del siglo XIX heredó las medias y la dispepsia crónica. De estas líneas heredó la torpeza y una vida demasiado efímera.

Elemental

Las puertas y ventanas estaban cerradas por dentro. Todas las huellas encontradas pertenecían a la víctima. Las ochenta y siete puñaladas descartaban un suicidio. No había rastro del arma homicida. La lista de sospechosos era inexistente.

—González, este caso es un verdadero intríngulis —musitó el inspector Salazar, e inmediatamente estalló de placer por haber logrado usar esa palabra por primera vez en su vida. La habitación quedó cubierta de una tibia papilla rosada. El caso seguía complicándose.

Cubriendo las expectativas

Hay algo acerca de los covers (o reversiones, para los puristas del lenguaje) que resulta fascinante. Sospecho que tendrá algo que ver con el concepto que se tiene del artista, en donde la creatividad es, por su misma naturaleza, un proceso casi egoísta y cerrado. Entonces, que un músico decida interpretar la obra de un tercero se transforma en una suerte de homenaje y, a la vez, de señal de humildad; es como si implícitamente se aceptara que el otro puede ser tan bueno como uno o aún mejor. Esto vale para todos los covers pero quizás es más notorio en los casos en que el salto de estilo musical es radical: un músico folk reinterpretando una canción hardcore, por ejemplo, o un grupo de culto animándose a tocar el último hit de una flamante banda pop. Por supuesto, se excluyen aquellos casos en que el cover no es más que una burla encubierta, pero la verdad es que suelen ser bastante obvios.

No hubo un hilo conductor demasiado definido más allá del concepto "los primeros que me vinieron a la cabeza" al seleccionar los temas para nuestro nuevo Mezcladito Entintado, dedicado (como ustedes ya imaginarán) a los covers. Algunas de estas reversiones me gustan más que sus respectivos originales, otras entraron por lo radical de su reinterpetación, otras ni siquiera son consideradas como covers porque superaron ampliamente en popularidad al original, pero todas me parecen notables. De hecho, hasta se cuela por ahí la canción que, por alguna razón perdida en el tiempo, le da nombre a este mismísimo weblog. ¡Premio moral al primero que se avive!

Ojalá que este flamante rejunte les sirva como apropiada cortina musical para un plácido fin de año. Paz y amor para todos.